Nuevo Laredo, Tamaulipas, 4 de junio de 2024 .— En pleno ejercicio de su labor informativa y amparados por la Constitución Mexicana, periodistas que cubren el proceso electoral en esta frontera, se enfrentan a un alarmante acoso militar que vulnera sus derechos fundamentales y atenta contra la libertad de prensa.
A pesar de que los periodistas, fotógrafos y camarógrafos, cuentan con identificaciones oficiales otorgadas por el Instituto Electoral de Tamaulipas (IETAM) y el Instituto Nacional Electoral (INE), para la cobertura del proceso electoral en Nuevo Laredo, enfrentan un preocupante acoso por parte del personal militar y de la Guardia Nacional, poniendo en evidencia una violación flagrante a los derechos constitucionales y la libertad de prensa en el país.
Los comunicadores, debidamente acreditados ante las instancias electorales, han denunciado agresiones físicas y verbales por parte de miembros del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional. Además, se les exige identificaciones, a las cuales se les toman fotografías, junto con el periodista, fotógrafo o camarógrafo, y su vehículo, ignorando las disposiciones constitucionales y legales que garantizan el ejercicio libre de la labor periodística.
Este acoso hacia los periodistas, fotógrafos, y camarógrafos de Nuevo Laredo, que están dando cobertura noticiosa al proceso electoral, pone de manifiesto una flagrante transgresión a los artículos 1, 5, 6 y 7 de la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos. Estos artículos garantizan la protección de los derechos humanos, la libertad de trabajo, el derecho a la información y la libre expresión de ideas, respectivamente.
El Artículo 1 establece que todas las personas gozarán de los derechos humanos reconocidos en la Constitución y en los tratados internacionales, sin restricciones ni suspensiones, mientras que el Artículo 6 garantiza el derecho a la información y a la manifestación de ideas, prohibiendo cualquier forma de censura previa.
Por su parte, el Artículo 7 consagra la inviolabilidad de la libertad de difundir opiniones, información e ideas a través de cualquier medio, prohibiendo la censura y cualquier intento de coartar la libertad de expresión.
El acoso militar hacia los periodistas no solo constituye una clara violación a la Constitución Mexicana, sino que también representa una amenaza directa a la libertad de prensa, uno de los pilares fundamentales de toda democracia. Las autoridades competentes deben tomar medidas inmediatas para garantizar la seguridad y el ejercicio pleno de la labor periodística durante el proceso electoral y en cualquier otro contexto.
Este tipo de acciones represivas y arbitrarias no solo socavan la confianza en las instituciones democráticas, sino que también ponen en riesgo la integridad física y emocional de los profesionales de la comunicación que desempeñan un papel crucial en la sociedad mexicana.